La definición de buyer persona es muy clara, ya que esta nos hace referencia a una representación ficticia de tu cliente ideal.
Por lo que es algo que puede variar siempre teniendo en cuenta los estándares de la empresa, su visión, entre otro par de cosas.
Sin embargo, se debe tener en cuenta la necesidad de basar la misma en base a datos reales con el comportamiento y las características demográficas que poseen nuestros clientes. De igual forma se debe mezclar una creación de sus historias personales, objetivos, motivaciones, sus retos, y también cuales sean sus preocupaciones.
Si te preguntas cómo lograr definir a mi buyer persona, debes saber que para hacerlo de la manera correcta tienes que pasar por el contacto del que es tu público objetivo, de forma que puedas llevar a cabo un análisis que sirva para identificar cuáles son las características comunes.
En el caso de que ya cuentes con una base de clientes tienes ventaja, ya que este será el lugar indicado para que empieces a hacer tus investigaciones. Sin importar que observes que los mismos cuentan con perfiles distintos, algunos de estos tenderán a ser lo que en realidad estás buscando.
Es importante que sepas que, para definir la buyer persona, te tienes que enfocar tanto en los clientes que has logrado satisfacer, como aquellos que quizá no quedaron con una muy buena experiencia de su interacción contigo. Y es que no sólo debemos pretender mirar hacia el lado que nos favorece.
Cuando tienes en cuenta ambos casos ganas la oportunidad de aprender mucho más acerca de cuál es la percepción de tu producto, y también los desafíos que los clientes están enfrentando al momento de adquirirlo. Por lo que el análisis será mucho más completo, arrojando mejores resultados para ti.