Aproximadamente el 70% de las empresas familiares no llegan a la segunda generación. Se trata de una alta tasa de mortalidad, y si llegan a la segunda generación, sólo un 9% aproximadamente pasa a la siguiente etapa. Hay varias causas para que esto ocurra, y una de ellas es la falta de una planificación de la sucesión de la empresa familiar.
La sucesión en la empresa familiar ha sido un tema muy discutido, debatido y analizado, ya que se ha considerado como una de las situaciones que más afectan a la empresa. Se considera un problema, pero debe tratarse como una fase de transición inevitable en cualquier empresa. La sucesión es una prueba de la madurez de la empresa, de su posicionamiento en el mercado y de su capacidad de adaptación a los proyectos propios y familiares.
Los empresarios que analizan el futuro de la empresa y crean un plan de sucesión con antelación logran una transición exitosa. Mientras que los empresarios que viven el día a día sin planificar y medir el rumbo de la empresa pueden tener mayores problemas en el relevo generacional.
Puede haber fundadores que quieran mantener el control del poder y las decisiones de la empresa, así como mencionar que están cansados de años de trabajo pero no delegan responsabilidades y no aceptan apoyo para llevar a cabo sus tareas. Esta situación complicaría aún más el plan de sucesión.
El plan estratégico debe ir de la mano del plan de sucesión, ya que las nuevas decisiones serán tomadas por el sucesor y con un plan ya establecido será un camino mucho más fácil de seguir ya que la empresa ya se dirigía hacia un lugar preestablecido.
La sucesión no es una situación fácil de realizar, por lo que es importante que todos los miembros involucrados tengan una participación activa, transparente y ordenada para generar una transición armoniosa dentro del grupo.
La naturaleza compleja que rodea a la empresa familiar la convierte en una organización especial debido a los tres elementos que la componen. La empresa, la familia y la propiedad dan el valor único a este tipo de negocios, y los investigadores en esta área han dado más importancia en los últimos años al análisis de estas organizaciones para saber cómo se comportan.
Como cualquier otra empresa, las empresas familiares tienen o deberían tener un plan de negocio que les ayude a gestionar y hacer crecer su empresa. Sin embargo, la planificación de la empresa familiar debe centrarse más en el aspecto familiar que en el empresarial.
Aquí se menciona por qué debería ser así.
Si el negocio va bien, te lo dirá con los ingresos y beneficios, y si va mal, te lo dirá con las pérdidas que tiene. Se trata de una ecuación bidireccional.
Sin embargo, en una empresa familiar hay que interactuar con los valores, pensamientos, ideologías y sentimientos de los miembros de la familia. Se dice que hay que dejar de lado los sentimientos y centrarse sólo en el negocio cuando se está dentro, y viceversa cuando se está en casa.
Pero, lo que realmente ocurre es que muchas familias lo involucran todo, por lo que hay que ser inteligente para controlar las situaciones emocionales y evitar que repercutan en el negocio.
Las necesidades de comida, casa, transporte, escuela, nuevos nacimientos y otros miembros de la familia se vuelven importantes para los involucrados. Si la empresa no es lo suficientemente fuerte desde el punto de vista financiero como para proporcionar los ingresos necesarios a la familia, se debe planificar cómo pueden salir adelante fuera de la empresa, o qué deben hacer para que la empresa crezca.
Muchas veces se comete el error de que la caja chica de la empresa es la caja chica de la familia, y si no se controla bien, puede descapitalizar las necesidades del negocio.
Si hay discusiones o divisiones en la familia que trabaja en la empresa, esto puede dificultar o incluso hacer que no se trabaje en la misma dirección.
Priorizar la armonía en la planificación de la empresa familiar podría implicar que los miembros busquen la forma de generar un trabajo en equipo, con una correcta división del trabajo y roles establecidos.
Sin duda, será más fácil trabajar en un entorno laboral y familiar saludable.
En este artículo tomaré como referencia diferentes bibliografías que mencionan lo que incluye la planificación estratégica de una empresa familiar. En las referencias se mencionan aspectos importantes que debe incluir una planificación estratégica.
Los principales autores sobre planificación estratégica son John Ward, Stephen Lawrence y Frank Moyes.
Los autores Acosta y Pérez (2010, P.85) en su investigación sobre Planificación Estratégica en Empresas Familiares, se refieren a Ward mencionando que la metodología para el desarrollo de un plan son los siguientes:
Los autores Lawrence y Moyes (2004, P.3) mencionan que los principales elementos para un plan de negocios exitoso son los siguientes:
Por lo tanto, un marco metodológico reducido para la creación de un plan estratégico para una empresa familiar puede ser el siguiente.
A partir de estos apartados, es posible obtener el planteamiento de los objetivos específicos del proyecto que necesita una empresa. Lo ideal sería complementar el plan con la realización del protocolo familiar para cubrir necesidades específicas de la familia.
