¿Qué es el pensamiento crítico? Definición y ejemplos
Los pensamientos críticos son aquellos capaces de ayudarnos a tomar las mejores decisiones, tanto en nuestra vida personal como profesional. Aunque no todas las personas tienen esta capacidad o la han desarrollado adecuadamente, el pensamiento crítico es una habilidad muy importante.
También se desarrollan distintas competencias, como las interculturales y las empresariales.
Aprenda en nuestro artículo no sólo una definición, sino también hechos y ejemplos importantes que le convertirán en un experto en la materia, siempre que decida leer hasta el final.
- Redaction Team
- febrero 6, 2023
- Carrera Profesional, Desarrollo Profesional
Definición de pensamiento crítico
La definición de pensamiento crítico no es única, ya que existe una para cada experto que se ha ocupado del tema. Pero he aquí una paráfrasis de lo que dijo Francis Bacon en 1605 al respecto:
Pensamiento crítico es tener el deseo de buscar, junto con la paciencia de dudar, ser aficionado a meditar, lo suficientemente lento para afirmar, poseer la disposición de considerar, el cuidado de poner en orden, y el odio de todo tipo de impostura.
Si a lo expresado anteriormente le damos una perspectiva un poco más moderna podemos afirmar que el pensamiento crítico se entiende como la capacidad de analizar y evaluar la consistencia de los razonamientos.
Esto es algo que se aprecia especialmente en aquellas afirmaciones que la sociedad toma como ciertas en el contexto de la vida cotidiana, como es el caso de las temidas fake news, y que cobran especial relevancia en la actualidad gracias a su proliferación y rápida viralización.
Ponemos el ejemplo de las fake news porque son individuos que llegan a adoptar comportamientos e ideas por la única razón de que una gran mayoría de la gente también lo hace. Y el antídoto más conocido contra esto es precisamente aprender a desarrollar el pensamiento crítico.
Lo que puede hacer un pensador crítico
Tener sentido crítico puede ayudarnos a discernir entre argumentos mediocres y brillantes, distinguiendo también la información valiosa de la prescindible. Con ella podemos desmontar prejuicios y encontrar conclusiones bien fundadas.
Además, el pensamiento crítico nos enseña a generar alternativas, a mejorar la comunicación a todos los niveles y a ser dueños de nuestra mente, actuando en consecuencia.
Y, aunque se trata de una actividad cognitiva estrechamente relacionada con la razón, la finalidad del pensamiento crítico está orientada a la acción, llegando a ser aplicable a cualquier aspecto de nuestra vida cotidiana.
Una vez que hayas desarrollado la habilidad podrás darte cuenta de cómo se ven favorecidos aspectos de tu vida cotidiana, como es el caso de la resolución de problemas o la toma de decisiones, teniendo una esfera de influencia que va desde lo personal hasta lo laboral.
¿Cuál es la posibilidad de adquirir habilidades de pensamiento crítico?
La realidad del asunto es que muchos expertos creen que es posible adquirir un pensamiento crítico, sobre todo si la formación comienza durante la etapa escolar. Una vez alcanzada la edad adulta, todo puede complicarse un poco más.
Sin embargo, en el caso de los adultos, hay algunas actitudes que pueden ayudar, como las siguientes:
Analice siempre la información en pequeñas dosis. Encontrar la importancia de los detalles, así como buscar los matices.
Practique la curiosidad y el escepticismo. Tiene que ver con formular preguntas y ser capaz de contrastar las respuestas con otras obtenidas de fuentes distintas.
Cuestionar todo lo que se nos dice. Se trata de un aspecto de vital importancia, sobre todo si siempre nos dicen cosas que están en consonancia con nuestras propias creencias.
Ejemplos de pensamiento crítico
Los ejemplos de pensamiento crítico que te daremos a continuación te servirán para ser aplicados en tu día a día, y al mismo tiempo para entrenar la habilidad que tienes cuando te encuentras con información de diferentes maneras.
No confiar en las redes sociales
No todo lo que encuentras en las redes sociales tiene por qué corresponderse con la realidad. De hecho, son plataformas en las que abundan la desinformación, las fuentes burlonas y los perfiles falsos.
Vivimos en una era hiperconectada, por lo que cualquier vídeo, foto o titular tiene la capacidad de hacerse viral en cuestión de segundos. De ahí la necesidad de prestar especial atención a la credibilidad de la información que se publica.
La intención es buscar siempre formas de contrastar los datos y afirmaciones que aparecen en ellos. Por ejemplo, si lees una noticia en un post de Facebook sin enlace a un sitio web oficial, busca el titular en Google para conocer los detalles.
No creamos todo lo que nos dicen las empresas.
Aunque siempre dirán que sirven al bienestar de sus consumidores, otro de los mejores ejemplos de pensamiento crítico en el día a día es no confiar ciegamente en las marcas por mucho que nos gusten.
Muchas empresas, y a veces como parte de sus estrategias publicitarias, pueden emitir mensajes confusos, engañosos o con medias verdades que los consumidores deben ser capaces de detectar.
Un ejemplo actual es el escándalo con Balenciaga y la red de pedofilia que se hizo pública en sus recientes campañas. A primera vista, la información que dan no es maliciosa, pero al comparar los detalles con otras fuentes nos damos cuenta de que los datos son reales.
Sea consciente de su estado de ánimo
A la hora de tomar decisiones importantes, siempre es necesario tener la mente despejada, así como un estado físico y emocional adecuado donde estemos libres de estrés, ansiedad, tristeza, entre otras sensaciones.
Cuando estamos inmersos en las sensaciones previas es posible que no podamos pensar con total lucidez. Y te preguntarás qué tiene que ver esto con el pensamiento crítico, y es muy sencillo:
Uno de los ejemplos más claros es el de una persona que debe decidir si utiliza o no su vehículo cuando está cansada o borracha. Uno debe pensar de forma crítica para decidir si su capacidad de reacción, o sus habilidades visuales, son adecuadas para conducir.